viernes, 11 de marzo de 2011

Macarrones a la Boloñesa

Macarrones a la boloñesa...
... integrales los unos y auténtica (o intento de ello) la otra. Es decir, que uso macarrones integrales y que he intentado que la salsa boloñesa sea lo más parecida a la italiana de verdad. Y es que en eso de cocinar, me encanta que las cosas sean lo máximo posible como son realmente. Sin más excentricidades, vamos con la receta que he hecho hoy mismo y por primera vez. Qué mejor plato para estrenar mi blog que uno tan nutritivo y rico como este... ¡manos a la obra!

Ingredientes que utilicé (cantidades, por supuesto, para una persona):
- Un poco de apio: "un poco" es una ramita, la más fina que había, como un dedo índice de largo. El grosor no llegaba ni al centímetro (era una penca muy pequeñita) y le dejé las hojitas.

- 1 cebolla pequeña (aunque depende de lo que te guste: si quieres más, ponle más, pero con una es suficiente y a mí, por ejemplo, me encanta).
- 1 diente de ajo "normal" o 2 pequeños (o 3 o 4 si te encanta el ajo).

- 2 hojas de laurel, lavadas y cortadas a la mitad.

- Sal gorda.

- Pimienta molida (yo uso una mezcla de muchos colores de pimienta, pero se puede usar la que se tenga en casa, negra o del color que sea).

- 1 cucharada de café de aceite de oliva.

- Vino blanco. También se puede hacer con tinto, pero yo esta vez la hice con blanco.

- Un bote de tomate frito (el mío, del todopoderoso Mercadona, es decir, marca Hacendado, concretamente ese que dice que está hecho con aceite de oliva. Confieso que me gusta hacer el tomate a mí misma, así que la próxima vez no pondré de bote, sino que usaré tomate natural y pondré un poco de zanahoria. Si te gusta más esta idea, pruébalo así y me cuentas).

- Carne picada al gusto. Yo usé de pollo (concretamente, contramuslos picados en la carnicería. Es más jugosa, pero puedes usar cualquier parte del pollo). También vale carne de cerdo, de ternera, de conejo... de lagarto...

- Macarrones integrales. También uso del Mercadona. Para una persona, la ración varía dependiendo, desde mi punto de vista, de cómo se va a hacer el plato de pasta. En este caso, como lleva carne, no he puesto 100 gramos, ni 50, sino que he bajado la proporción a 40 gramos. Me ha salido un plato bastante correcto (para plato único, era poco, pero yo comí verduras de primero). Vamos, que pongas la pasta que quieras, pero con moderación, que luego el plato sale muy grande y lo que no queremos para nada es tirar la comida.


Cómo lo hice:
Lo primero es poner la pasta a cocer. Yo sólo cuezo en agua, sin aceite y sin añadir sal ni nada por el estilo. Agua muy caliente, abundante (aunque la pasta sea poca) e hirviendo a borbotones. Peeero, en este caso, tenía un poco de agua sobrante de haber hervido unas alcachofas, así que, en lugar de poner agua, puse mitad de agua y mitad de ese caldo. No sé realmente si han cogido algo de sabor los macarrones, pero desde luego que más vitaminas digo yo habrán absorbido. Esta cantidad de pasta (40 gramos) estará lista en unos 8 minutos (al dente). Yo dejé pasar unos 5 minutos y apagué el fuego, pero los dejé en el calor. A los 8 minutos, la escurrí y la enfrié. Estaba durita, pero así está bien para que, una vez la boloñesa hecha, se termine de cocer con el calor de la salsa. Una vez hecho eso, nos vamos con la salsa:

En una ollita (de unos 18 centímetros), puse el aceite, con el fuego muy bajo. Le agregué el laurel mientras picaba el ajo en trocitos muy pequeños. Eché el ajo. El aceite, aunque el fuego estaba bajo, estaba ya caliente, así que se deja así, bajo pero caliente, mientras picamos la cebolla muy pequeña también. Cuando terminemos, la echamos con los ajos y removemos. Le echamos sal. Subimos un poco el fuego para que la cebolla empiece a dorarse. Ponemos a fuego medio (medio bajo) y tapamos para que poche un poco.
Mientras tanto, picamos muy pequeño el apio. Se lo añadimos pasados unos minutos, unos 3 0 4, o cuando la cebolla está a tu gusto. Retiramos el laurel y le damos un golpe de fuego, subiéndole mucho el calor (mi vitrocerámica llega al 12, pues ahí) para que agarre un poco al suelo de la ollita. No os paséis que se quema (y eso tampoco lo queremos...). Cuando ya haya una costrita en el fondo, de un color marroncito, bajamos el fuego y echamos la carne. Sofreímos un poco a fuego bajo. Cuando suelte el jugo, le subimos el fuego hasta que empiece a cambiar de color. Esto debe durar poco (depende de la carne). En mi caso, tuve el pollo así un par de minutos. Si se deja mucho en este punto, creo que después estaría muy seco... Con el fuego alto, vamos a echarle un chorreón de vino blanco y movemos enseguida. La costrita de la olla se despegará y se hará una salsita con el vino. Dejamos que cueza un poco, un par de minutos, a fuego vivo, para que el alcohol se evapore y para que la carne se impregne bien del sabor del vino. Después, añadimos un chorreón (también al gusto) del tomate y removemos. Dejamos que cueza todo junto, a fuego medio, un par de minutos, removiendo suavemente. Ponemos bien de sal y, sobre todo, de pimienta. Hacedme caso. La pimienta después ha resultado darle un saborazo tremendo. No hablo al 100% segura, pero creo que la pimienta gusta mucho en los platos de pasta italianos... (al menos eso empecé a pensar cuando vi la receta de la auténtica carbonara, que dicen que eso de "carbonara" viene de que parecía un carbón de tanta pimienta...). En serio, el toque de pimienta es genial. Es lo mejor. Apagamos el fuego, pero dejamos la olla en el calor. Cuando ya esté quieta (es decir, que no esté borboteando ni nada), ponemos los macarrones, movemos sólo un poco, y cerramos la olla. La dejamos reposar y servimos. Si la preparáis para la noche o estáis haciéndolo con antelación, basta con darle un calentón antes de comerla, teniendo en cuenta que debéis hacerlo partiendo de un fuego muy suave, para que no se nos estropee tanto esfuerzo y delicadeza.


Bueno, esta es la receta. Os aseguro que no os va a decepcionar porque salen riquísimos. Yo, hasta ahora, no había comido unos macarrones tan ricos. Había comido macarrones con carne y tomate... pero... boloñesa... boloñesa los de hoy, y eso que no he podido hacerla tal y como realmente debe ser. La próxima vez, tomate natural (usar el de bote me ha dolido...).
Dejo un enlace al blog "Pan y Varios" que consulté para ver los ingredientes de la verdadera boloñesa italiana, y que podéis visitar pulsando aquí.


Por último, me gustaría ofrecer (dentro de mis posibilidades) un aproximado informe nutricional del plato. Haré esto con cada una de las recetas, pero OJO, no soy profesional, sólo lo hago teniendo en cuenta los conocimientos que me da leerme todas las partes de atrás de los paquetes...


El informe nutricional de este plato de Macarrones a la Boloñesa es...

- En lo que se refiere a calorías, el plato no llega a las 500. Tened en cuenta que la pasta son sólo 40 gramos, que aportan unas 170. El resto, es verdurita, sin mucho aceite. Pongámole a toda la verdura unas 100 (pasándonos mucho). El tomate de bote no es muy calórico, depende de la cantidad que usemos. Pongamos que usé la equivalente a unas 45, 50 calorías. Puede resultar más calórico si hemos usado carne de cerdo o de ternera, pero la de pollo aportará, en este caso, al estar refrita... vamos a ponerle unas 200. Más o menos, este es el recuento que yo hago, repito, de principiante, que no soy nutricionista, y estimado.

- En cuanto a grasas, no tenemos nada de grasa saturada. El aceite nos aporta grasa "buena" (y es muy poco). Las verduras no tienen, el tomate de bote apenas llega al gramo (la cantidad que yo usé). Depende de la carne, tendrá más o menos grasa. En este caso, del pollo quizá sean 5 o 6 gramos, no creo que mucha más para la cantidad.

- En cuanto a hidratos de carbono, tenemos los de la pasta. Para no comer hidratos innecesarios en la misma comida, no añadí pan ni picos, ni otros hidratos... pero vamos, que no pasa nada, aunque la ración de pasta cubre los hidratos proporcinales para el almuerzo. Lo importante es que los hidratos son complejos. En cuanto a simples (los azúcares), esta cantidad de pasta apenas tiene y la que puede tener el tomate o los demás ingredientes es irrisoria.

- Por su parte, nuestra raciónde proteínas queda cubierta con el pollo. ¿Para qué queremos más?


Y... ahora debería poner una foto, pero como la idea del blog se me ocurrió después de disfrutar de este plato, no hay foto... pero en la receta de mañana seguro que la hay.


Espero que os guste.
Que leáis.
Que comentéis.
Pero, sobre todo...
... que cocinéis y disfrutéis...



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